... son como vos

Desde el camarín estuve por hacer una... "nota" sobre un viaje en tren. Pero viendo lo convulsionados que estamos tuve que girar a babor.

El concepto de "Los que mas tienen aportan para el resto del país" me parece acertado siempre y cuando se respete una consigna de justicia y aprovechamiento de esos recursos.

De todos modos, al margen de la disputa económica de turno (ahora son las retenciones, después son los planes no-trabajar) creo que hay cosas que si se llegan a romper van a ser muy difíciles de recuperar.

Si bien es sabida la prepotencia de algunos piqueteros/cuerpo de choque/sindicalístas ("peronistas de Peron") oír decir a D'Elía que no le tiene miedo a los "blancos de barrio norte" me da, por demás, escalofríos.

¿Miedo a qué? ¿Miedo a nosotros mismos?. Mismo cuando escuchamos tratar a ciertas personas de Negros... ¿Estamos en una partida de ajedrez? ¿Dónde sacrificar peones es moneda corriente?

TODOS estamos dentro del mismo país y si no queremos que se hunda TODOS tenemos que remar para el mismo lado. En un barco se tratan de evitar los amotinamientos, pero al marino no se lo castiga por estar en contra de su capitán mucho menos cuando gran parte de la tripulación lo está. Mas bien se CONCILIAN ambas partes. Porque se sabe que se necesita de TODOS a la hora de enfrentarse al mar.

A los D'Elía que miran a "los blancos" como golpistas enemigos, y los "blancos" que miran a los "negros" como ladrones, vagos y piqueteros a todos les digo:
Esos que vos mirás, esos, son como vos.

Rompamos una botella... Hagamos un blog.

El ritual del bautismo de los barcos se remonta a tradiciones paganas que implicaban, cuándo no, un sacrificio. Luego de perder marineros valiosos se decidió sacrificar algo menos importante como la vida de un animal. Si, perdone greenpeace, pero la vida de un animal es menos valiosa que la de un hombre... Aunque este sea un animal.
Se dice que los griegos fueron aún más inteligentes y empezaron a tirar al casco del barco botellas de vino. Que inteligentes, que revolucionarios, los griegos.
Hoy en día, como el petróleo no se embotella, en los cascos de los barcos que están por iniciar su primer viaje, se rompe una botella de champagne.

Asi que, este blog a punto de partir merece una botellita, aunque sea de 750cc.

Mientras limpio el monitor de champagne, y junto los vidrios rotos heredados del ritual de iniciación el oleaje nos empuja a alejarnos de la orilla... Llevado por la corriente se la modernidad que ahora encuentra un nuevo grito con los blogs, y mientras este no se quede afónico, les doy la bienvenida a bordo de un viaje en el que intentaremos ver algo más de lo que el horizonte nos dicta.

Eso si, recuerden vomitar por la borda.